Mata o pequeño arbusto de 25-35(40) cm, muy ramoso, erecto, como una pequeña escobita, de la familia Cistaceae.
Fumana es un neologismo botánico basado en la palabra latina fumus, humo, por el aspecto gris ahumado de este género: lo creó un tal Thomas Bartholin, danés del s. XVII, que fue al mismo tiempo médico, teólogo, fisiólogo, matemático y botánico.
Tallos jóvenes glanduloso-víscidos, especialmente en el tercio superior. Hojas 6-12(15) × 0,6-1 mm, esparcidas, erecto-patentes, lineares, mucronuladas, canaliculadas, ciliadas, glandulosas o no; las inferiores, más pequeñas, dispuestas de forma densa, imbricadas, glabrescentes; las superiores, algo mayores, patentes y glandulosas. Inflorescencia 4-6(8) cm, de 2-3(4) flores, densamente glanduloso-víscida; brácteas lanceoladas, menores que las hojas, glandulosas, ciliadas; pedicelos, patentes, delgados, recurvados hacia el extremo, glandulosos, persistentes tras la caída del cáliz y cápsula. Sépalos externos estrechamente ovales, ovados, de costillas prominentes y ciliadas. 5 pétalos de 5-6 mm, amarillo vivo. Cápsula 6-7 mm, generalmente con 9 semillas, caduca tras la diseminación junto con el cáliz. Florece y fructifica de Febrero a Mayo.
Diferenciación de otras especies del género: Fumana laevipes es de hojas alternas filiformes, de color glauco, Fumana thymifolia las tiene ovales, siendo una matilla postrada. Fumana procumbens, como las restantes, tiene flores solitarias extraaxilares, a diferencia de Fumana scoparia que las tiene en racimos, dispuestas entre las hojas de los tallos fértiles, de pedicelos recurvados y gruesos. Fumana ericoideses la que mas se parece en su porte, de gruesas ramas erectas, pero es de flores solitarias. Fumana ericifolia tiene un porte bien distinto, de ramas finas arqueado ascendentes, dando lugar a matas procumbentes. La especie mas parecida es la disposición de la flores es Fumana paradoxa, no presente en la Sagra y la alcarria madrileña, aunque si en páramos altos de Guadalajara y Cuenca, esta última es de porte almohadillado, pulvinular.
Mediterrénea. En la Peninsula, solo en el este y bastante localizada. En Lérida y Tarragona, Comunidad Valenciana, Málaga, Sevilla y Jaén. En Castilla, en Albacete, Cuenca (zona del Cabriel, dudosa en la Alcarria conquense) y sudeste de Madrid, donde se encuentra en los pueblos del valle del Tajuña desde Ambite hasta Villaconejos, también en la vertiente norte del Jarama, desde Arganda del Rey hasta Chinchón. En tomillares y matorrales claros, soleados, en suelos yesosos, margosos, calizos o arcillosos con canto silíceo, básicos y profundos.