Endemismo del sur, centro y centro-norte peninsular, terófito de la familia Cruciferae.
El nombre del género se formó a partir del griego διπλόω diplóo doble yτάξις tàxis orden, colocación: si se abren sus silicuas se ven las diminutas semillas dispuestas en dos filas. Virgata, del latín virga, verga o vara, por sus tallos erectos y foliosos de hasta 1 m. de altura; con pelos hirsutos, a veces retrorsos, nunca adpresos, a veces muy densos, sobre todo en la parte inferior. Hojas inferiores hirsutas con pelos más o menos patentes, limbo de hasta 30 cm, de pinnatífidas a pinnapartidas, con 4-6 pares de segmentos ovados y otro terminal mayor que los laterales, todos dentados a lobados; las medias similares, progresivamente más pequeñas y simplificadas; las superiores no amplexicaules, cortamente pecioladas, elípticas o lanceoladas, hastadas o semihastadas, a veces indivisas. Flores en racimos multifloros, ebracteados, que se alargan mucho en la fructificación. Sépalos erecto-patentes de hasta 4,5 mm, con pelos patentes, rara vez glabros, los medios algo cuculados. Pétalos amarillos, de hasta 12 mm, con uña diferenciada. Estambres 6, los laterales fértiles. Estigma bilobado. Frutos de hasta 37 mm, generalmente erecto-patentes, nervio medio marcado, valvas comprimidas y por lo general torulosas, rostro con 1-2 semillas, de hasta 5 mm, comprimido y nervado. Pedicelo de hasta 24 mm, siempre mayor de 4 mm, acortándose hacia el ápice de la inflorescencia. Semillas en dos filas, ovoides o elipsoidales.
Puede florecer a lo largo de todo el año, excepto en los meses con heladas.
Muy común y abundante en el Sureste de Madrid y La Sagra, todos los años imprescindible en el paisaje del territorio del herbario con pinceladas amarillas cuando está en flor.
Arvense y ruderal, se cría en todo tipo de suelos, en pastos secos, terofíticos y subnitrófilos, bordes de caminos y cunetas.
Imágenes de D. virgata virgata