Hierba anual de la familia de la familia Cruciferae .
De tallos ramosos, erectos o algo inclinados, hasta 80 cm de altura. Hojas algo crasas, pruinosas y glabras. Con una roseta de hojas basales obovadas u orbiculares, enteras y pecioladas, en ocasiones raras algo crenadas, mientras que las del tallo son, conforme ascienden por este cada vez mas sentadas hasta llegar a amplexicaules y de margen entero. Las flores se agrupan en racimos de 20-40 flores, mientras que Moricandia arvensis, presenta racimos de 10-20 flores. Con cuatro sépalos y cuatro pétalos, los sépalos erectos y desiguales, de tal forma que dos de ellos tienen unos pequeños cuernos en su extremo y los otros dos tienen su base gibosa, y de color verde purpureo o purpuras. Los pétalos de hermoso color de violeta a púrpura, con venas mas oscuras del mismo color. Frutos en silicua de 6 a 14 cm y hasta 3mm de ancho, rectos o algo arqueados, erecto-patentes y un poco comprimidos, con un tabique longitudinal que define dos lóculos en los que se alojan. Las semillas son el carácter que nos permite diferenciar esta especie de su pariente Moricandia arvensis, en la cual aparecen en dos filas paralelas además de que no tiene sépalos corniculados, mientras Moricandia moricandioides solo presenta una única fila de semillas.
Endemismo ibérico con 4 subespecies, la moricandioides es la que se distribuye por Madrid y provincias limítrofes, en lugares con abundancia de calcio, también en yesos, principalmente en calizas deleznables o margas ya sean calizas o yesíferas, también arcillas, descarnadas, en lugares soleados, con elevadas pendientes o directamente en taludes o grietas de rocas. Florece de febrero a junio, pero la hemos visto floreciendo ya desde primeros de enero: los inviernos cada vez más cálidos adelantan la floración y no sería de extrañar encontrar ejemplares comenzando a florecer ya en diciembre. En Madrid está citada de los Santos de la Humosa, Santorcaz y Alcalá de Henares y nosotros la conocemos de Rivas-Vaciamadrid, donde es muy abundante en las solanas de el Campillo de San Isidro, en las vertientes hacia la Laguna de El Campillo sobre margas calizas y en algunos puntos de los cantiles de El Piul, donde crece en paredes de yeso.
Imágenes de M. moricandoides
Imágenes de M. moricandoides