Hierba perenne de la familia de las Adoxaceae.
Sambucus ya era el nombre que daban los romanos al Sambucus nigra y en ocasiones también a esta especie; como suele ser habitual en nombres clásicos, el origen de la palabra se desconoce aunque Ginés López, profundo conocedor de las etimologías, apunta a un idioma del Egeo. Ebulus (ébulus) era, en latín, el nombre que se daba con más propiedad al yezgo.
Planta rizomatosa que pese a alcanzar el metro y medio-dos metros de altura con tallos robustos y rígidos es de consistencia herbácea y adquiere una tonalidad rojo-vinosa en otoño para luego secarse totalmente en su parte aérea. Las inflorescencias, que aparecen desde mayo a agosto y más tarde, son muy llamativas, corimbiformes, de 5 a 16cm de diámetro normalmente con 200 a 250 flores que pueden llegar a ser más del doble; blancas con alguna tonalidad rosada, que dan lugar a unas drupas glabras, negras y brillantes. Para defenderse de los herbívoros despide un olor desagradable muy intenso y característico que recuerda el sabor de las almendras amargas: como éstas, es cianogenético: se descompone dando lugar a cianhídrico. Aunque en tiempos se haya usado en medicina popular y sus bayas se hayan empleado para colorear el vino, es tóxica en todas sus partes.
Aparece en poblaciones densas y aisladas por casi toda la Península (rara en la región luso-extremadurense) en bordes de campos, zanjas, pastos poco cuidados, márgenes de cursos de agua, sobre terrenos calcáreos-arcillosos, hasta los 1400m, los 1800 en condiciones favorables. Circunmediterránea, se extiende por Asia central templada hasta el Himalaya. En Inglaterra la llaman «hierba Danesa», Danewort, y existe la creencia, común pero totalmente falsa, de que indica lugares en los que se libró alguna batalla cruenta contra los piratas e invasores daneses.
Imágenes de S. ebulus