Planta perenne de hasta 70 cm. de la familia de las compuestas.
El nombre del género ya lo usaban los romanos, que lo aplicaban a la centaurea mayor, Centaurea centaurium L. y los griegos; deriva del griego Kéntauros, la mezcla de caballo y hombre de la mitología griega, uno de los cuales, Kirón o Quirón, tenía grandes conocimientos de medicina y hierbas medicinales. El género como tal fue creación de Linneo que agrupó en él otros muchos de autores anteriores. Cuenta con más de 70 especies en la península ibérica, que aún se están estudiando y delimitando, de forma que pueden ser bastantes más. Nuestra península es el centro de diversificación del género, cuya identificación se basa, fundamentalmente en las características de las brácteas del capítulo floral, que son espinosas, dentadas, ciliadas o con fimbrias o flecos, en diverso número, forma, longitud y ángulo.
Hojas basales lirado-pinnatifífidas o lirado-pinnatisectas con 2-5 pares de lóbulos rematados con un espina cónica; las caulinares medias decurrentes, enteras o lobuladas; las superiores sin lóbulos con una espina apical más larga. Capítulos terminales, alcanzados por las últimas hojas que no suelen sobrepasarlos. Involucro de hasta 26×21 mm, ovoide a globoso, umbilicado o redondeado en la base. Apéndice apical palmeado espinoso, con frecuencia reflexo, con las espinas dispuestas en un fila, los de las brácteas involucrales medias con 7-12 (14) espinas, la central (6)7-10(14) mm. Corola de las flores neutras con tubo blanquecino y 4 lobulos, rosa a purpúreos; las de las flores hermafroditas pentalobulados.
Ruderal y arvense.