Hierba anual de la familia Boraginaceae.
Asperugo, en Plinio, era una planta de aspecto áspero, híspido (en latín el sufijo –ugo quiere decir «algo, un poco», por lo que el nombre se puede traducir por «planta algo áspera») por sus setas rígidas; el epíteto, del latín procumbere, tumbarse, ha pasado a ser palabra técnica de la terminología taxonómica para referirse a los tallos prostrados, que se arrastran por el suelo sin enraizar en los nudos, con el ápice erecto, lo que es generalmente cierto en esta especie aunque a veces tiene tallos ascendentes o trepadores: además de las setas híspidas, sus tallos de sección cuadrangular con costillas marcadas cubiertas de acúleos retrorsos le permiten trepar sobre otras plantas y obstáculos.
Las hojas también presentan setas, antrorsas, recurvadas, en sus márgenes y nervio medio por el envés; son más o menos lineares-elípticas, pecioladas las inferiores, con limbo atenuado en el peciolo las intermedias y sentadas las superiores, alternas. Cáliz setoso que en la fructificación forma dos valvas características, lobulado-dentadas, que abrazan las núculas; corola poco mayor o igual que el cáliz, en floración de color púrpura o violeta.
Común en el Sureste de Madrid y La Sagra en herbazales ruderales con cierta humedad. De distribución euroasiática, presente también el ne Magreb, vive en suelos básicos: calizas, margas, yesos, rara vez en suelo arenoso, como ruderal- arvense, de terreno nitrificado. En la Península, hasta los 2300m. Florece entre (marzo) abril y junio (septiembre).
Imágenes de A. procumbens

La Boyeriza, Martín de la Vega (M) Darío Meliá

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