Fanerófito siempreverde de hasta 35 m. de la familia Fagaceae.
El nombre Quercus ya lo usaban los romanos para referirse a todos los árboles de bellota, tanto a las encinas como a los robles. A los robles los llamaban también robur, robustos; el epíteto es de origen griego/latino  petraîos, -a, -on; lat. petraeus, -a, -um = que nace entre las piedras.
Copa amplia y regular; ramitas de color castaño, generalmente glabras, con muchas lenticelas claras. Hojas membranáceas de hasta 15 x 9 cm, prontamente caducas, espatulado-lanceoladas a oblongo-ovobadas, 5-7 (8) pares de nervios secundarios con nerviación de tercer orden poco apreciable; discoloras y glabras por el haz con pubescencia muy corta dispersa por el envés quedando con el paso del tiempo solo en  la axila de los nervios algunos pelos simples; de contorno lobado a subpninnatífido; pecíolo de hasta 30 mm, glabro, canaliculado. Bellota sésil o con pedúnculo muy corto, cúpula con escamas ovado-lanceoladas, planas dorsalmente.
Prefiere suelos silíceos sueltos y aireados aunque puede vivir en fisuras de rocas. A veces forma masas puras, con frecuencia vive en robledales de Q. robur, hayedos y pinares.
En la Península vive en la mitad norte, siendo escaso en la Sierra de Guadarrama.
Castilla La Mancha: Taxon vulnerable (VU)
Extremadura: Taxon vulnerable (VU)
Madrid: Taxon de interés especial (IE)
Imágenes de Q. petrae

Somosierra (M) Rafel Baudet

 

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