Herbácea perenne, en ocasiones bienal y hasta anual, de la familia de las Scrophulariaceae.
El nombre Verónica es obviamente de mujer, que se ha relacionado con el latino Berenice, a su vez derivado del griego Phereniké; su relación con plantas no está del todo clara, pero se da por segura la información de Giacinto Ambrosini, director del Huerto Botánico Universitario de Bolonia en el  s.XVII, según el cual la Veronica officinalis L. ya se llamaba verónica en las boticas alemanas de su época y que posiblemente las verónicas no se conocían en época clásica grecorromana.
El epíteto específico, formado por dos palabras unidas para no romper la norma que quiere que se use un solo vocablo, indica por un lado la similitud de sus flores con los del género Anagallis y por otro el hábitat, siempre en proximidad o dentro de aguas poco profundas.
De dimensiones muy variables, de 10cm a un metro y hasta metro y medio de altura, parece estar relacionado con la renovación del agua: si crece al lado de corrientes de agua, bordes de arroyos, canalillos etc suele alcanzar buenas dimensiones, en aguas encharcadas y zonas húmedas suele quedarse enana. Tallos glabros, erectos o ascendentes, generalmente ramificados; hojas glabras, las basales cortamente pecioladas (pecíolo de hasta 4mm) las caulinares sésiles ( a lo sumo las medias subsésiles) de base suamplexicaule a cuneada, de ápice agudo. Inflorescencias en racimos opuestos, de 20 a 90 flores pediceladas que forman un ángulo generalmente agudo sobre su raquis; corola de cuatro pétalos, rotácea, el pétalo adaxial un poco más ancho y el abaxial claramente más estrecho que los laterales.
Subcosmopolita, extendida por toda la Península  en los hábitats descritos desde la altura del mar hasta los 2100m y en casi toda Europa, florece entre marzo y diciembre.

Veronica anagallis aquatica
Veronica anagallis aquatica