Planta herbácea trepadora. Hemicriptófito de la familia Asclepiadaceae.
El nombre del género ya aparece en el latín medieval para otra especie, V. hirundinaria, por la errónea, y peligrosa, creencia de que servirían como «venceveneno». Es muy tóxica, en especial su rizoma subterráneo. Nigrum, negro,posiblemente por sus flores oscuras.
Descripción: 30–100 cm. Hierba perenne, a veces trepadora y voluble, pubérula. Hojas (3,5)5–16 x (1,5)2–7,5 cm, opuestas, simples, ovado–lanceoladas, acuminadas, enteras, de base redondeada o raramente algo cordiforme. Flores 5–8 mm de diámetro, actinomorfas, hermafroditas, pentámeras, dispuestas en cimas axilares; pedúnculos 5–30(85) mm; pedicelos 3–8 mm; corola rotácea, con pétalos de 4–5 mm, soldados en la base, oblongo–lanceolados, ± patentes en la antesis, de color marrón oscuro, casi negro al secarse, pelosos por la cara superior; corona sin apéndices, cerca de 1/3 de la longitud de los pétalos; estambres unidos al gineceo. Folículo 4–7,5 x 0,7–1,2 cm, fusiforme, liso; semillas con penacho de pelos sedosos de 17–18 mm. V–VIII.
Hábitat y distribución: Crece en lugares sombríos, rocosos, frescos, como roquedos, pedreras en umbrías, barrancos o sotobosque de encinares y quejigares, y en toda clase de bosques climatófilos mediterráneos bien desarrollados. Tiene algo de preferencia por suelos calizos pero admite los silíceos: en Madrid está citado en los calerizos cretácicos de San Agustín de Guadalix, hay citas de Cutanda en el Pardo El Escorial etc, más modernas en el Paular y lo hemos visto en un vallejo húmedo que baja al Guadarrama en su curso medio, entre quejigos, arces de Montpellier y cornicabras.
En el sureste madrileño es citada de Arganda y nosotros lo hemos encontrado en los encinares del barranco del Horcajo, un enclave resguardado y sombrío donde también crecen el arce de Montpellier y la cornicabra, en San Martín de la Vega, en el quejigar de Valdelaguna, otro enclave más húmedo que la media del entorno, un pequeño bosque desarrollado, sombrío y fresco, en los barrancos y bosques de la Peña Ahumada, en Carabaña y en el quejigar de Torres de la Alameda.
Imágenes de Vincetoxicum nigrum