Bienal de la familia Compositae, generalmente de hasta 1,8 m, pudiendo superar ampliamente los 2 m. El nombre en latín era sillybum, del griego σίλυβον/σίλλῠβον sílybon/síllybon que Dioscórides aplicaba a varios cardos comestibles como éste, y Vaillant al describir el género prefirió usar la opción de usar una sola ele.El epíteto y el nombre común, en la mayor parte de los idiomas europeos, procede de una leyenda medieval, según la cual María ocultó a Jesús de los soldados de Herodes con sus grandes hojas y sobre éstas cayeron unas gotas de leche de su pecho, quedando para siempre el cardo bendecido con sus características venas blancas, inconfundibles.
Espinosa, tallos erectos, flocosos-lanuginosos. Hojas basales pecioladas de hasta 50 cm, las caulinares sentadas, auriculado-amplexicaules, alternas, pinnatífidas o pinnapartidas, con espinas blanco-amarillentas en el margen. Flores en capítulos terminales de hasta 4 cm, solitarios. Involucro con varias filas de brácteas coriáceas y divergentes (a diferencia de S. eburneum con brácteas que se cruzan). Flores hermafroditas, pentalobuladas, purpúreas. El fruto es un aquenio de hasta 8 mm, con un vilano de hasta 2 cm, muy apetecido por los jilgueros y otros pequeños pájaros.
Florece a partir de marzo-abril y maduran los frutos a lo largo del verano.
Común y abundante en el Sureste de Madrid y La Sagra. Ruderal y viaria Crece en escombreras, cunetas, baldíos, lindes de cultivos, etc; en suelos ricos en nutrientes, profundos, más o menos húmedos. Indicadora de suelos secos al final de su ciclo. Originaria del Sur de Europa, Norte de Africa y Oriente Próximo, se ha naturalizado en América, donde se cultiva para usos medicinales en algunos países, como también ocurre en China.
Imágenes de S. marianum